Hace casi seis años publiqué una pequeña serie de entradas sobre una mudanza en plena ola de calor. Este invierno nos ha tocado otra, sin calor, pero más estresante si cabe. He estado desconectado del mundo, entre unas cajas y otras, y con un SAP enloquecido de postre, no vuelvo al servicio hasta ahora. Y con ganas: la última partida de Ánima data de diciembre y la de Pendragón, de primeros de enero. Mucho tiempo de sequía y mucho mono.
Como decían en aquella vieja serie de dibujos: Es hora de combatir el crimen.
La mudanza, I, II, III, IV y V.
Nos vemos en el Forlon.