Este sábado comenzamos con la campaña Sakura, una historia de samuráis ambientada en Lannet, la especie de Japón que trae la ambientación oficial de Ánima Beyond Fantasy, ¡y con cuatro jugadores!, algo que no ocurría desde la tercera partida de Los viajes del Ícaro. Repetían Menxar y Charlie. De los otro dos, una no jugaba a Ánima conmigo desde casi Fort Nakhti y el otro no había jugado antes, ni conmigo ni, a efectos prácticos, a Ánima. Así que como introducción use Benath an Opal Moon, la aventura introductoria del Land of Samurai del Runequest de Mongoose (ahora Legend). En su momento ojeé la aventura y no me llamó la atención, pero después de leer el desarrollo de la misma en el Runeblog tenía unas ganas tremendas de jugarla.
La aventura es simple y predecible, pero cumple muy bien su función de aventura introductoria: permite presentar la ambientación y el sistema de juego a los jugadores, con buenas posibilidades de roleo, de uso de habilidades, un combate sencillo para tantear el sistema y otro con más entidad como clímax final. Para el máster, además, ofrece interesantes consecuencias futuras. Y, para rematar, es muy agnóstica respecto al sistema de juego y resulta muy fácil adaptarla a otros.
—Pero tú debes ir, hime-chan —le había dicho su padre—. Las alianzas y los lazos familiares deben cultivarse con constancia, por eso debes ir a Aimi, abrir la casa, ir a los templos de la ciudad de tu madre, comprar a los mercaderes locales, recibir a nuestros amigos y aliados. He mandado un mayordomo para que lo prepare todo: déjate guiar por él, pero recuerda que eres la representante del clan Ishikawa y del domino de los valles de Minako-hime.