Durius, la última frontera

Primero dominó esa tierra un imperio élfico. Levantaron grandes maravillas que aún perduran, se extendieron por todo el mundo conocido, entraron en una espiral de decadencia y desaparecieron. Ocuparon su espacio una tribu de enanos, venida del lejano oriente. Rudos, amantes de la cerveza y la mantequilla, miraban por encima del hombro a sus ahora súbditos humanos y elfos. Nunca fueron una gran potencia y no pudieron resistir el embate orco, la ola que todo lo barrió, hasta estrellarse en las montañas del norte, donde se refugiaron los últimos hombres, elfos y enanos libres.

El tiempo tampoco perdonó al imperio orco, que terminó fragmentado en pequeños reinos, enfrentados entre sí. Y la tierra bajo las montañas, a orillas del gran río quedó desierta, una gran tierra de nadie, la nueva frontera. Y se fue poblando. De hombres, buscando tierras de cultivo y la libertad de no servir a señores de medio pelo; de trasgos, escapando del dominio orco; de bandidos, mercenarios, mercaderes, algún dragón despistado.


Necrópilis de Cuyacabras

Niebla, la última ciudad, es el punto de contacto entre el reino y la frontera. Apenas un pueblo grande, bajo la autoridad del rey, en un escarpado y profundo valle. A sus espaldas, la seguridad de las montañas y la autoridad del rey; a sus pies, la tierra prometida; entre sus murallas y su castillo, el último refugio seguro. Un lugar de encuentro donde comienzan los sueños.

Una idea de campaña de dungeoneo clásico para AD&D o D&D5 o algo similar que se me ha ocurrido estos días, mientras me volvía a ver Hai to Gensou no Grimgar y Menxar me contaba que había encontrado un manual del jugador de AD&D fotocopiado en casa de sus padres.

No es muy original: habla del repoblamiento de la cuenca del Duero en la Reconquista y se inspira en la zona de los Picos de Urbión y la Sierra de la Demanda, de las evocadoras tumbas de Revenga, de Cuyacabras, de Palacios de la Sierra. Llevo bastante tiempo dándole vueltas a una campaña de Runequest (ahora Mythras) en aquellas tierras en torno al siglo IX y esto no deja de ser otra variante.

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